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sábado, julio 03, 2004

Magic: Juventud, divino tesoro (I)

Magic The Gathering, uno de los mayores sacacuartos de la historia. Magic The Gathering, un gran juego de cartas. Me quedo con lo segundo, aunque lo primero tambien sea cierto. Magic representa, en esencia, el enfrentamiento entre dos o más magos hasta que solo uno queda con vida. Para conseguir eso, dispone de una serie de hechizos que se representan mediante cartas. Estas cartas, en función de su poder, serán más o menos sencillas de ejecutar.
Tras el concepto inicial, lo mejor es que alguien que sabe jugar te enseñe. Puedes comprar, y no sería desaconsejable, un kit de iniciación, pero al final, eso solo te servirá para aprender las diferentes fases que forman cada uno de los turnos en los que tratarás de acabar con tu enemigo. Aprenderás los rudimentos, pero solo eso. Las dudas no te las podrá resolver el manual. Y te surgirán dudas, eso seguro. Pero superado el momento inicial, en el que palabras como maná, arrollar, coste de invocación o contrahechizo pueden echar para atrás a más de uno, todo se resume en un poco de memoria y eso sí, práctica, mucha práctica.
La parte central del juego son, evidentemente, las cartas. Las tenemos de diferentes tipos, desde las que afectarán directamente al mago rival, hasta las que nos ayudarán a conseguir las primeras, pasando por cartas que evitarán que perdamos la vida.
Todas y cada una de las cartas tienen algo en común: el coste de invocación. En otras palabras, todas las cartas necesitan que "hagas algo" para conseguir el efecto deseado. Eso algo que necesitas es, generalmente, gastar una cierta cantidad de maná. Y, ¿qué es el maná? El maná representa la energía mágica que dispone nuestro mago. Continuará en el siguiente capítulo... ¿Alguna pregunta hasta aquí?